Décadas de los 80 y 90

Fue hacia los años 80 cuando se constató la excepcional composición química de nuestro agua, muy baja en residuo seco, pero hasta los 90 no se obtuvo su declaración como agua mineral.

El artífice del reconocimiento a sus cualidades fue Don Esteban Luengo, uno de los miembros de la familia a la que pertenecían las tierras en las que, de manera natural y durante siglos, ha estado afluyendo este manantial. Esteban durante años y años, con empeño y tesón persiguió su deseo por demostrar la excelente calidad del agua de este manantial hasta hacerlo realidad.

Con el primer nombre de Luengo, en homenaje a su primer promotor, antes de su comercialización pasó a denominarse Teleno en referencia a su origen.